Exerez 1910.
- Redactor
- 20 may 2024
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Zapatos para toda la vida.

Ramón Exerez uno de los pocos maestros artesanos zapateros que existen en España, nos confirma que sí, que el tiene zapatos de hace mas de 40 años.
La zapatería artesana es una maestría que ha entrado en cierta crisis por falta de profesionales y dedicación. Ramón, creció entre pieles, hilos y pegamento. Estudiaba en una sobria mesa, en el taller de su padre, zapatero desde 1910. De pequeño era un "tirillas" por lo poco que comía; hasta que el karate vino a suplantar cualquier complejo vitamínico, logrando maravillas en su etapa de desarrollo. Tanto le cautivó este arte marcial, que se ha convertido en un referente de esta modalidad en España. Ha pertenecido al equipo nacional, llegando a fundar su propio gimnasio para continuar practicando y enseñando. También aprendió durante cuatro años esgrima, la combinación perfecta para que aquel cuerpo delgado, se convertiría en una verdadera arma letal.
Cuando llego la hora de convertirse en el novio de la que ahora es su mujer, se enfrento a una situación, que le supuso una verdadera encrucijada, un autentico dilema, de solución difícil; Ramón quería dinero, para casarse, pero su padre le lanzó el típico ultimátum de, “estudias o trabajas”.
No quedando otro remedio, Ramón se encontró en el camino de trabajar y aprender que para él, desde un principio, se presentó unido.
El aprendizaje de Ramón es muy visual: le basta una primera observación, para saber cómo se desmonta un zapato y es capaz de volver a montarlo perfectamente. Con este don y su inquietud por conocer a los mejores de todo el mundo, le sirvió para aprender una maestría difícil de seguir en nuestros días. Su capacidad y su gran simpatía, le granjeó grandes amistades en todo el mundillo: Inglaterra, Francia, Italia, Estados unidos, España, aunque su debilidad son los ingleses.
¿Dónde se aprende esta profesión extinta?
Ramón nos comenta que hace unos años fue ponente para el evento "Madrid Excelente”, durante la charla facilitó un dato que dejo boquiabiertos a los asistentes: en el centro urbano de Tokio, hay más de 60 zapateros a medida, que han estudiado en Europa.

¿Dónde?
Pues en Italia hay una escuela llamada Arsutoria school, en Inglaterra hay otro centro en Northampton, pero el verdadero aprendizaje está en las grandes marcas, que seleccionan becarios para que aprendan el oficio de los mejores artesanos, a la vez que trabajan.
En la marca George, los hijos de los empleados acudían por las tardes para practicar; en Crockett, se encuentra un área de cantera, donde los veteranos preparan a la siguiente generación. Es un oficio gremial que se tarda una media de cinco años en aprender. En Francia se considera una diplomatura de estado.
¿Cuales son los mejores zapatos de caballero del mundo?
La respuesta es contundente: los ingleses, la manufactura británica. Nos dice Ramón, “los zapatos italianos, son muy pintones, pero el problema es que no se puede caminar con ellos porque la horma es incomoda, en general”. El zapato español es de calidad extraordinaria, pero carecemos de constancia en la producción. Todas las marcas han ido cambiando sin crear escuela y ahora copiamos a los americanos, luego a los chinos... con la honrosa excepción de Pepe Albadalejo. En España tenemos mucha capacidad de improvisación y eficacia en el trabajo, por ejemplo, tu encargas unos zapatos en Inglaterra y tardan 14 semanas en hacerlos, sin embargo, en España, el tiempo va a ser de una semana, pero no somos constantes con el diseño de un zapato que además de ser elegante y pintón debe también ser cómodo y adaptable, desde el primer momento.
Otro dato curioso es que el zapato francés, por ejemplo, JM Weston, siendo muy buen zapato, aquí no se vende por ser francés. Si hablamos del zapatos portugués, para Ramón son de muy buena calidad, pero, como le dice su amigo Carlos Santos, es necesario el distintivo europeo, para facilitar su venta: "...cuando vendo mis zapatos, pongo CEE, en vez de Portugal. En Francia se venden muy bien, pero con otro nombre".
La piel de los zapatos ha perdido calidad con el tiempo, ahora las vacas viven más tiempo y tienen más venas, la piel está más vascularizada, por lo que se consigue menos calidad de cada partida y por tanto menos aprovechamiento en los cortes de las piezas. Crockett, antiguamente, descartaba solo el 30% de la piel, en la fabricación de sus zapatos. En la actualidad están descartando el 40%. Ramón nos descubre que las mejores pieles en este momento, se encuentran en Francia. Un sector complejo y exigente en todas sus zonas, que cada vez fabrican menos a medida.
¿Cómo debemos cuidar los buenos zapatos para que sean eternos?
Los mejores productos para cuidar los zapatos son franceses; hay una marca que se llama Saphir que es un referente de calidad y cuidado. Se debe empezar limpiando bien el zapato; hay un producto llamado Renomat, que abre el poro y quita las manchas de la piel. Después esta misma marca tiene un aceite de visón, que viene a ser la crema hidratante de los zapatos, para que los nutra y mantenga.
Estos productos tienen que usarse cada cierto tiempo, aplicando después otra crema para recuperar el color de la piel y finalmente utilizar el betún tradicional. Esta operación hay que hacerla dependiendo del tiempo que utilicemos el zapato. Lo que es inevitable a diario es escupir, si habéis leído bien, escupir, para después cepillar, ya que la saliva es el mejor disolvente de la suciedad, que hay. Cualquier arañazo en un zapato se puede reparar simplemente aplicando un poco de saliva con el dedo, el arañazo desaparece, como por arte de magia. En el mantenimiento es muy importante ayudarse de hormas, para que los zapatos no se deformen con el uso. Guardar cada par de zapatos en su horma, garantizará la durabilidad en el tiempo.
Otro secreto, que seguro te ha pasado: cuando llueve o hemos estado en la nieve, al secarse el zapato, le aparece un halo blanco sobre las zonas que más han sufrido.
¿Qué podemos hacer?
Frotar con un paño de vinagre disuelto en agua, dejar que seque, frotar con un paño suave y después de quitar la mancha, tratar el zapato como hemos mencionado anteriormente.
Si estas leyendo estas líneas y tienes en casa algún buen zapato que quieras restaurar, puede hacerlo en Casa Exerez, de manera muy sencilla y difícil en estos tiempos.
Puedes llamar a su servicio de recogida a domicilio, vendrán, te recogerán los zapatos y te proporcionarán un presupuesto sin compromiso, previo diagnostico de la reparación. Su política es flexible: si lo aceptas, comenzara la restauración, con los estándares de calidad más exigentes, sino aceptas, te devolverán los zapatos, sin coste alguno.
Para contactar: info@casaexerez.es, o en el teléfono 667785928.
Unos buenos zapatos te acompañaran toda la vida, cuidaran tus pies y tu imagen, siempre y cuando tu también los cuidas.
Gracias Ramón, por ayudarnos a entender mejor una maestría tan desconocida estos días.